jueves, 8 de noviembre de 2007

martes, 6 de noviembre de 2007

Causas de la Guerra Hispano- Americana

Tras la expansión y conquista de los Estados Unidos en los antiguos territorios de México durante la primera mitad del siglo XIX, las grandes potencias mundiales se disputaban a finales de ese siglo las colonias por razones de economía. Un país era más poderoso en tanto su influencia y moneda se hacían sentir en más territorios y colonias.

Por otro lado, las boyantes economías experimentaron en el último tercio del siglo una crisis de crecimiento al quedar inundados los mercados internos. Se imponía la necesidad de abrir nuevas rutas comerciales e incorporar nuevos territorios que absorbiesen la producción industrial.

Así, en la Conferencia de Berlín de 1884 las potencias europeas decidieron repartirse sus áreas de expansión en el continente africano, con el fin de no llegar a la guerra entre ellas. Otros acuerdos similares delimitaron zonas de influencia en Asia y especialmente en China, donde se llegó a diseñar un plan para desmembrar el país, que no podría llevarse a cabo al desatarse la Primera Guerra Mundial.

Sin embargo, los acuerdos no acabaron por eliminar completamente las fricciones entre las potencias. A finales del siglo XIX, se sucedieron las disputas por determinados puertos y fronteras cuya delimitación no estaba clara, sobre todo en África. Ejemplos de esto son el incidente de Fachoda entre franceses y británicos, las disputas germano-portuguesas por el puerto mozambiqueño de Kionga, el ultimátum lanzado por los ingleses contra la expansión portuguesa en Zambia y la polémica desatada entre franceses, británicos, alemanes y españoles por el dominio de Marruecos.

Los Estados Unidos, que no participaron en el reparto de África ni de Asia, fijaron su área de expansión inicial en la región del Caribe y, en menor medida, en el Pacífico, donde su influencia ya se había dejado sentir en Hawaii y Japón. Tanto en una zona como en otra se encontraban valiosas colonias españolas (Cuba y Puerto Rico en el Caribe, Filipinas, las Carolinas y las Marianas en el Pacífico) que resultarían una presa fácil debido a la fuerte crisis política que sacudía su metrópoli desde el final del reinado de Isabel II. En el caso de Cuba, su fuerte valor económico, agrícola y estratégico ya había provocado numerosas ofertas de compra de la isla por parte de varios presidentes estadounidenses (John Quincy Adams, James Polk, James Buchanan y Ulysses Grant), que el gobierno español siempre rechazó. Cuba no sólo era una cuestión de prestigio para España, sino que se trataba de uno de sus territorios más ricos y el tráfico comercial de su capital, La Habana, era comparable al que registraba en la misma época Barcelona.

A esto se añade el nacimiento del sentimiento nacional en Cuba influido por las revoluciones francesa y americana, el nacimiento de una burgesía local y las limitaciones políticas y comerciales impuestas por España que no permitía el libre intercambio de productos, fundamentalmente azúcar de caña, con los EE.UU. y otras potencias. La radicalización de estos sentimientos provocó que se desatara entre 1868 y 1878 la Guerra de los Diez Años bajo la dirección Carlos Manuel de Céspedes hacendado del oriente de Cuba. La guerra culminó la firma del Paz del Zanjón, que no sería más que un tregua.

Si bien este pacto concedía algunas concesiones en materia de autonomía política y que posteriormente, en 1880, se logró la abolición de la esclavitud en Cuba, la situación no contentaba completamente a los cubanos debido a su limitado alcance. Debido a esto los rebeldes volvieron a sublevarse en 1880 en la llamada Guerra Chiquita.

Por otra parte, José Martí, escritor, pensador y líder independentista cubano, fue desterrado a España en 1871 debido a sus actividades políticas. Martí en un principio tiene una posición pacifista con el pasar de los años su posición se radicaliza. Es por esto que convoca a los cubanos a la guerra necesaria por la independencia de Cuba. Para esto crea el Partido Revolucionario Cubano bajo el cual se organiza la Guerra del 95.

La escalada de recelos entre los gobiernos de EEUU y España fue en aumento, mientras en la prensa de ambos países se daban fuertes campañas de desprestigio contra el adversario. En América se insistía una y otra vez en la valentía de los héroes cubanos, a los que se mostraba como unos libertadores luchando por liberarse del yugo de un gobierno y un país que era descrito como tiránico, corrupto, analfabeto y caótico. Por su parte, los españoles, que no tenían ninguna duda de la intención de EEUU por anexionarse la isla, dibujaban a unos hacendados avariciosos y arrogantes, sostenidos por una nación de ladrones indisciplinados, sin historia ni tradición militar, a los que España debería darles una lección.

Cada vez parecía más inminente el desencadenamiento del conflicto entre dos potencias que otros países consideraban de segunda: una impetuosa, joven y todavía en desarrollo, que buscaba hacerse un hueco en la política mundial a través de su economía creciente, y otra vieja, que intentaba mantener la influencia que le quedaba de sus antiguos años de gloria. Los líderes estadounidenses vieron en la disminuida protección de las colonias, producto de la crisis económica y financiera española, la ocasión propicia de presentarse ante el mundo como la nueva América, la nueva potencia mundial, con una acción espectacular. De hecho esta guerra fue el punto de quiebre en el gran ascenso de la nación estadounidense como poder mundial, pero para su antagonista significó la acentuación de una crisis que no se resolvería sino hasta la segunda mitad del siglo XX, cuando España finalmente logra recomponerse y ubicarse nuevamente entre las principales naciones del mundo.

viernes, 19 de octubre de 2007

La paz es un estado de ánimo que nos da tranquilidad, quietud y comienza en uno. Si tengo paz, siento el amor; eso me permite relacionarme bien con los que me rodean y por supuesto tener una buena convivencia. Cuando hay ausencia de paz y amor; hay presencia de problemas y ambiciones descontroladas.

Escogí este video porque al verlo pude observar que tanto las imágenes como la letra de la canción guardaban mucha relación con el tema. Este, comienza con las siguientes palabras: paz, amor, respeto y comprensión. Yo pienso que estos cuatro conceptos son fundamentales para vivir en armonía con todo el mundo. Pero lamentablemente, esto se está perdiendo completamente, por esta razón el video lleva un buen mensaje; para concienzar a las personas de lo que realmente estamos perdiendo y cuanto nos está afectando. El video presenta muy buenas imágenes de lo que estamos viviendo hoy en día; y repite varias veces: criticar la maldad y el ego, rechazar las drogas, el alcohol, o sea el falso apego. Trata de enfocar y proyectar una buena intención y estimular la conciencia. Para poder sostener la paz hace falta la unión de familias, la educación y una buena comunicación entre las personas, ya que esto es la base para fortalecer la sociedad. Sólo triunfaran los que nunca dejen de luchar y los que tengan fuerza espiritual. Pienso que esto es muy cierto, porque hay que luchar por lo mejor y nunca olvidarnos de Dios, que es el guía de nuestros pasos y el constructor de nuestros caminos.

Finalmente digo: no luches con nadie, vive en paz, sin odio, libertad en un mundo en el que convivir es vivir en paz. Vivir en solidaridad, olvidar la violencia, no criticar y si amar. Necesitamos hoy: volar hacia un nuevo horizonte, lejos del mal. Caminemos sin rumbo hacia la libertad.

Espero que disfruten y entiendan el buen mensaje de este video.

Música de Paz

lunes, 8 de octubre de 2007

Creación de mi blog

Hoy 8 de octubre de 2007, el Grupo 10-1 del Modelo de Educación Global; tuvimos la oportunidad de crear un blog. Con la ayuda de la Sra. Pérez, nuestra maestra de Historia de Puerto Rico.